Los mantecados, auténticas joyas culinarias, representan la esencia misma de las festividades navideñas. En la región, Castilla-La Mancha, estos dulces son parte integral de la celebración, adornando cada hogar con su irresistible fragancia y sabor. Esta receta en particular se erige como un hito en la memoria gastronómica, pues nos regala mantecados francamente deliciosos, que encierran la esencia de la tradición y la exquisitez.
Si eres fanático de las galletas con manteca y te gusta muchísimo las almendras. Esta es una fusión perfecta para que prepares ya que se mezclan los dos gustos en una sola galleta. Dejando como resultado un espectacular sabor.
Es una comida muy sabrosa. Es ideal para compartirla con tus amigos, familiares, seres queridos o simplemente degustarla de manera solitaria. Es muy fácil y sus resultados son excelentes. Así que anímate a preparar esta receta ¡Manos a la obra!
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Ingredientes para preparar unos ricos Mantecados de almendra
- 3 yemas de huevo
- 125 g de manteca a temperatura ambiente
- 250g de almendra molida
- 250g de azúcar
- 125ml de aceite de girasol
- 300g de harina todo uso
- 1 clara batida para pincelar
- Canela y azúcar para espolvorear
Procedimiento
- En un recipiente, combinamos la manteca y el azúcar, asegurándonos de lograr una mezcla homogénea. Incorporamos las yemas de huevo y continuamos mezclando. Agregamos el aceite y procedemos a incorporar la almendra molida, así como la harina tamizada. Amasamos la mezcla hasta obtener una masa compacta.
- Extendemos la masa con un rodillo hasta alcanzar un grosor de 1 cm. Utilizando un cortapasta, damos forma a los mantecados.
- Colocamos los mantecados en una bandeja de horno previamente forrada con papel manteca. Los pincelamos con la clara batida y los espolvoreamos con una mezcla de azúcar y canela.
- Horneamos en un horno precalentado a 180ºC, con calor superior e inferior, sin aire, durante aproximadamente 12-15 minutos, o hasta que adquieran un ligero tono dorado. Es crucial estar atentos para evitar que se doren demasiado.
- Retiramos los mantecados del horno y dejamos enfriar, ya que son delicados cuando están calientes. Este paso garantizará la textura perfecta y la preservación de su encantador sabor.
¡Listos para deleitar los sentidos con estos exquisitos mantecados navideños! Tus comensales te agradecerán de haberles preparado esta receta tan deliciosa. No pueden faltar en la mesa navideña.
