Los clásicos Sacramentos, son la mejor opción para acompañar unos ricos mates o un café con leche, solos o con algún relleno son muy tentadores.
De hecho, tienen su historia religiosa y el nombre que los acompaña desde de fines del siglo XIX. Tanto las bolas de fraile, los sacramentos y el suspiro de monja, recibieron ese nombre cuando el sindicato de Panaderos de la Argentina estaba dirigido por facciones anarquistas.
Precisamente le otorgaron estos nombres a las facturas, a modo de un irónico h0menaje a la iglesia en la que no creían para nada. Lo cierto es que se han convertido en un verdadero clásico y que se pueden consumir a toda hora.
Pero estos sacramentos son toda una tentación, solos o con jamón y queso, son ideales para prepararlos en casa. Además de ser una receta fácil y sencilla de hacer, no requiere de ingredientes complicados de conseguir, ni demanda demasiado tiempo de preparación.
Veamos la receta con los ingredientes que se alistan y toda la preparación:
Ingredientes
Para la masa:
- 500 gr. de Harina 000
- 25 gr. de Azúcar
- 10 gr. de Sal
- 25 gr. de Levadura fresca
- 200/250 cc. de Agua tibia
Para el empaste:
- 200 gr. de Margarina (si encontramos para hojaldre mucho mejor)
- 25 gr. de Harina
Preparación para los Sacramentos
Para la masa de los Sacramentos:
1) Comenzamos agregando la harina en un bowl amplio y formar una corona, hacemos un hueco en el centro y añadimos los ingredientes. También le vamos sumando de a poco el agua tibia mientras se mezcla todo para unir los ingredientes, podemos comenzar con una cuchara y terminar con la ayuda de las manos hasta obtener un bollo suave y tierno.
2) Luego cubrimos el bowl con un repasador y dejamos reposar hasta leudar.
Para el empaste:
3) Ahora hacemos el empaste uniendo la margarina con la harina y amasando, reservamos.
4) Paso siguiente, envolvemos el empaste doblando hacia el centro y después los bordes hacia arriba.
5) A continuación, estiramos el empaste.
6) En este paso, hacemos un primer doblez simple en tres, quedando tres capas de masa.
7) Seguidamente, tapamos y dejar leudar durante unos 15 minutos aproximadamente.
8) Luego estiramos y hacemos un segundo doblez pero en 4.
9) Nuevamente llevamos los extremos hacia el centro y después doblamos, quedando en 4 capas de masa.
10) Tapamos la masa y dejamos leudar durante 15 minutos.
11) Ahora procedemos a estirar la masa hasta alcanzar 1/2 centímetro de espesor y dejamos reposar entre 5 a 7 minutos.
12) Seguimos cortando triángulos de 6 centímetros de base, tapamos y dejamos descansar otros 10 minutos.
13) Paso siguiente, estiramos el triángulo de masa y luego las puntas hacia adentro.
14) Para terminar, vamos a acomodar en placas para horno ligeramente aceitadas, cubrimos con un repasador y dejamos reposar durante unos 20 a 25 minutos.
15) Finalmente, le damos cocción en el horno precalentado a 180º C, durante unos 12 a 15 minutos aproximadamente.
¡Cuando salgan del horno estarán listos para degustar de estos irresistibles Sacramentos, solos o con relleno, imperdibles!
Consejos:
- Una recomendación, para que lo disfrutes como recién horneado, es dejarlo abierto a lo largo preparado para el sandwich y dentro de una bolsita de un día para otro.
Se trata de una miga que es sumamente tierna para cortar y si no podes resistirte, es sumamente delicioso recién salido del horno. Ya sea que lo consumamos así solo, o bien con relleno de jamón y queso.
