El lirio de la paz es una planta perenne que pertenece a la familia Araceae con sus hojas grandes, lanceoladas y de un verde intenso, con un característico nervio central. Las flores del lirio de la paz son blancas y están rodeadas por una espata verde pálida que se asemeja a una hoja y pueden aparecer durante todo el año, especialmente en condiciones de cultivo óptimas y con estos tips tu lirio de la paz florecerá todo el año
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Con estos tips tu lirio de la paz florecerá todo el año
Luz adecuada: El lirio de la paz tiene un mejor crecimiento en ambientes con luz indirecta brillante evitando la exposición directa al sol porque podría quemar sus hojas delicadas. Tienes que colocar la planta cerca de una ventana o en un área bien iluminada de su hogar. Si la luz no es suficiente puedes utilizar luces artificiales de espectro completo para brindarle la cantidad correcta de luz.
Temperatura y humedad: Estas plantas prosperan a temperaturas entre 18°C y 24°C evitando los cambios de temperatura y corrientes de aire frías. El lirio de la paz también ama la humedad por lo que rociar regularmente las hojas o colocar un humidificador cerca puede ayudar a mantener un ambiente adecuadamente húmedo.
Riego: La clave para regar el liro de la paz es «menos es mejor» ya que estas plantas prefieren un suelo ligeramente húmedo pero no abrumado por el agua ya que solo se la humedece cuando el primer centímetro del suelo esté seco. De esta manera tienes que utilizar una maceta ocn un buen sistema de drenaje porque el estancamiento del agua dañará sus raíces.
Fertilizante: El lirio de la paz se encuentra beneficiado de una dieta ligera ya que durante la temporada de crecimiento desde la primavera hasta el verano puede fertilizar la planta cada 6-8 semanas con un fertilizante equilibrado. Reducir elf ertilizante en otoño e invierno cuando la planta esté en estado de reposo.
Poda: Cortamos las hojas amarillas o dañadas para estimular el crecimiento de nuevas hojas. La poda regular puede mantener la planta en forma y evitar la acumulación de hojas muertas.
Trasplantar: Repetimos el lirio de paz cada 2-3 años o cuando notemos que las raíces están llenando completamente la olla, utilizando tierra de buena calidad para plantas de interior y asegurándonos de que la olla nueva sea ligeramente más grande que la anterior.
Limpieza: Limpiamos las hojas regularmente con un paño húmedo para eliminar el polvo ya que esto ayudará a la planta a respirar mejor y a mantener su capacidad de purificar el aire.
Problemas comunes: Tenga cuidado con los parásitos como pulgones y cochinillas que pueden atacar el liro de la paz ya que hay que inspeccionar con frecuencia la planta y tratarla con insecticidas o soluciones naturales.
Reproducción: El lirio de la paz se puede propagar dividiendo el rizoma o a través de esquejes y esto le permitirá obtener nuevas plantas de una planta madre saludable.
