El morera negra (Morus Nigra) también conocido simplemente como «Mora» es un árbol de frutal espectacular ya que es conocido por sus deliciosas frutas de color oscuro y su sabor tan dulce y en este artículo te explicamos cómo cultivar un árbol de morera negro en macetas en casa
Hoy en día no es una fruta muy conocida pero nuestros abuelos la consumían con mucha frecuencia.
Esta fruta crece en los jardines o en los campos pero también existe la posibilidad de poder cultivarla con éxito en maceta en casa, permitiendo que cualquiera pueda disfrutar de su delicioso sabor.
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Cómo cultivar un árbol de morera negro en macetas en casa
- Comenzamos seleccionando una maceta bien grande de unos 50-60 litros de capacidad para que el sistema de raíces pueda crecer adecuadamente.
- Nos aseguramos de que la olla tenga varios agujeros de drenaje para evitar el estancamiento del agua.
- Utilizamos un suelo bien drenado beneficioso en materia orgánica, como una mezcla de suelo para plantas frutales y compost.
- Compramos una planta de morera negra de un vivero de confianza o un agricultor experimentado asegurándonos de que la planta se encuentre en perfectas condiciones y sin signos de enfermedad o parásitos.
- Buscamos un lugar soleado donde recibirá al menos 6-8 horas de luz solar directa por día asegurándonos de que la maceta sea fácilmente movible.
- Mantenemos el suelo húmedo pero no en exceso ya que hay que regarla regularmente asegurándonos de que drene bien para evitar la acumulación de agua.
- Fertilizamos el árbol con un fertilizante equilibrado para plantas frutales durante la temporada de crecimiento (Primavera y verano)
- Podamos ligeramente para eliminar las ramas dañadas o enfermas y de esta manera favorecemos una forma compacta.
- Protegemos el árbol del frío intenso en invierno llevándolo a un lugar protegido o cubriendo la maceta con un tejido aislante.
Recomendaciones
- Elige una maceta grande y profunda que permita un buen desarrollo de las raíces del árbol. Asegúrate de que tenga agujeros de drenaje en la parte inferior para evitar el encharcamiento del agua.
- Mantén el sustrato ligeramente húmedo, pero no saturado. Riégalo regularmente, especialmente durante los meses más cálidos del año. Evita el riego excesivo, ya que puede provocar la pudrición de las raíces.
