Las milhojas, una joya clásica en el universo de la repostería, se elevan a nuevas alturas de deleite cuando se fusionan con la riqueza y suavidad del dulce de leche. En esta travesía culinaria, exploraremos cómo las capas crujientes de hojaldre entrelazadas con rellenos dulces y sedosos se combinan para crear una auténtica sinfonía de sabores y texturas. Si buscas un giro original a las tradicionales milhojas, estás en el lugar adecuado; ¡aquí te presento la receta perfecta!
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Ingredientes para hacer Milhojas con dulce de leche
- 1 hoja de hojaldre congelado, delicadamente descongelado
Crema pastelera
- 1 1/2 tazas de leche
- 1/2 taza de azúcar
- Una pizca de sal
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
- 3 cucharadas de maicena
- 3 yemas de huevo
- 1 cucharada de manteca
- 1 taza de dulce de leche
Procedimiento
- Despliega con cuidado la hoja de hojaldre sobre una bandeja con papel manteca y, con un delicado compás, pincha la superficie con un tenedor para que respire mientras hornea. Deja que se despierte en el horno precalentado a 200°C, danzando entre 15-20 minutos hasta que se vista de dorado y crujiente.
- Luego, permite que se enfríe, preparándose para la sinfonía de sabores que está por venir.
- En una cacerola, lleva la leche a un casi ebullición, preparándola para unirse a la mezcla seca de azúcar, sal, vainilla y maicena.
- En esta alquimia de sabores, las yemas batidas entran en escena, mezclándose con la leche caliente para crear una crema sedosa.
- Cubre esta creación con un velo de film transparente y resérvala en la frescura del refrigerador hasta que alcance la armonía fría.
- Una vez que el hojaldre ha enfriado, realiza un corte maestro en tres rectángulos iguales.
- En la primera capa, despliega una generosa porción de dulce de leche, creando la base para la sinfonía.
- La segunda capa se convierte en un lienzo para la crema pastelera.
- La tercera, una cobertura exquisita.
- Para coronar esta obra maestra, espolvorea azúcar impalpable por encima. Este toque final completa la experiencia, elevando las milhojas a una categoría de éxtasis culinario.
Las milhojas con dulce de leche son, sin lugar a dudas, una obra maestra del dulce. Cada capa, un acto en la sinfonía, se une para crear una experiencia memorable. Ya sea para ocasiones especiales o simplemente para indulgencia personal, atrévete a preparar esta combinación exquisita y deleita tu paladar. ¡Que cada bocado sea una nota de placer! ¡Buen provecho!
