El Ossobuco a la Milanesa es un plato icónico de la cocina italiana, originario de la región de Lombardía, y famoso por su combinación de carne tierna, cocida lentamente, y una salsa rica y aromática.
Este plato tradicional se enriquece con un sofrito de verduras, vino blanco y caldo de res, que juntos crean una salsa espesa y llena de sabor.
Con esta receta, aprenderás a prepararlo paso a paso y descubrirás algunos trucos para conseguir una textura perfecta y un plato lleno de matices. ¡Manos a la obra!
Ingredientes
Para el Ossobuco:
- 2 jarrete de ternera (osobuco)
- 1 zanahoria, finamente picada
- 1/2 cebolla dorada, finamente picada
- 1 costilla de apio, finamente picada
- 1 cucharada de tomate puré
- 70 ml de vino blanco seco
- 30 g de manteca
- Caldo de res, cantidad suficiente
- Aceite de oliva extra virgen, cantidad suficiente
- Sal y pimienta, al gusto
- Harina, cantidad suficiente
Para la Gremolata:
- 1 ramo de perejil, finamente picado
- 1/2 limón, ralladura
- 1 diente de ajo, finamente picado
- Una pizca de sal
Preparación
1. Preparar la carne:
- Realizar pequeños cortes en los bordes de cada jarrete para evitar que se encojan durante la cocción.
- Sazonar con sal y pimienta al gusto y enharinar ligeramente, sacudiendo el exceso de harina.
2. Sellar la carne:
- En una sartén grande, derretir la manteca con un chorrito de aceite de oliva a fuego medio-alto.
- Dorar los jarretes de ternera por ambos lados hasta que tengan un color dorado uniforme. Retirar y reservar.
3. Preparar el sofrito:
- En la misma sartén, añadir un poco más de aceite si es necesario y sofreír la cebolla, la zanahoria y el apio hasta que estén tiernos.
- Incorporar la pasta de tomate y cocinar por 2 minutos, removiendo bien.
4. Desglasar y cocinar a fuego lento:
- Verter el vino blanco en la sartén y raspar el fondo para desprender los sabores. Cocinar hasta que se reduzca a la mitad.
- Volver a colocar los jarretes en la sartén y añadir suficiente caldo de res caliente para cubrir parcialmente la carne.
- Tapar y cocinar a fuego lento durante aproximadamente 2 horas, hasta que la carne esté tierna y se desprenda fácilmente del hueso.
5. Preparar la gremolata:
- Mientras el ossobuco se cocina, mezclar el perejil picado, la ralladura de limón, el ajo y la sal en un recipiente pequeño.
6. Servir:
- Una vez cocido el ossobuco, retirarlo de la sartén y espolvorear con la gremolata justo antes de servir.
- Se puede acompañar con risotto a la milanesa, polenta cremosa o puré de papas.
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Consejos Adicionales:
Para una salsa más espesa: Puedes triturar parte de las verduras antes de servir.
Sabor más intenso: Si tienes tiempo, cocina el ossobuco un día antes y recaliéntalo, los sabores se intensificarán.
Opcional: Añadir un toque de ralladura de naranja a la gremolata para un aroma más cítrico.
¡Disfruta de tu ossobuco a la milanesa con gremolata!