Si buscás un postre fácil, rápido y bien refrescante, esta receta de banana y naranja sin horno es ideal. Tiene una textura suave y cremosa, con el equilibrio justo entre dulzura y frescura, perfecto para compartir en familia o sorprender a tus invitados. Además, al no necesitar horno, es una opción práctica para los días calurosos o cuando querés hacer algo dulce sin complicarte demasiado en la cocina. Nos hemos apoyado con la información del siguiente video:
Ingredientes Necesarios
Base de Banana y Naranja:
- 3 bananas maduras
- 2 naranjas (sin semillas y bien jugosas)
- 250 ml de leche
- 80 g de azúcar
- 100 ml de agua
- 30 g de gelatina sin sabor (hidratada previamente en agua fría)
Segunda Capa:
- 2 bananas maduras
- 20 g de manteca
- 80 g de azúcar
- 500 ml de leche
- 100 g de azúcar adicional
- 100 ml de agua
- 30 g de gelatina sin sabor
Última Capa:
- 350 ml de jugo de naranja recién exprimido
- 600 ml de leche
- 150 ml de leche condensada
- 120 g de almidón de maíz (fécula de maíz)
- 100 g de azúcar
- 1 naranja cortada en rodajas finas para decoración
- Ralladura de naranja para un toque extra de sabor
Pasos para la Preparación
- Preparar la primera capa:
- Pelá las bananas y las naranjas, cortalas en trozos y licuá junto con la leche y el azúcar hasta obtener una mezcla bien homogénea.
- Disolvé la gelatina en agua caliente y mezclala con la preparación anterior.
- Volcá la mezcla en un molde y llevá a la heladera por al menos 5 horas hasta que esté firme.
- Segunda capa:
- En una sartén, derretí la manteca y agregá las bananas en rodajas junto con el azúcar. Cociná hasta que estén caramelizadas.
- En una cacerola aparte, calentá la leche con el azúcar adicional.
- Disolvé la gelatina en agua caliente y agregala a la mezcla de leche.
- Volcá esta preparación sobre la primera capa ya fría y volvé a refrigerar hasta que solidifique.
- Última capa:
- Mezclá el jugo de naranja, la leche y la leche condensada en una cacerola.
- Disolvé el almidón de maíz en un poco de leche fría y agregalo a la preparación.
- Cociná a fuego medio, revolviendo constantemente hasta que espese.
- Retirá del fuego y dejá entibiar antes de verter sobre la segunda capa.
- Decorá con rodajas de naranja y ralladura de cáscara.
- Volvé a refrigerar por al menos 5 horas antes de servir.
Consejos y Recomendaciones
- Usá bananas bien maduras: Aportan más dulzura natural y una textura más cremosa.
- Para un postre más firme: Aumentá un poco la cantidad de gelatina en cada capa.
- Si querés un toque más fresco: Agregá unas hojitas de menta o un poco de esencia de vainilla.
- Presentación más elegante: Podés hacer el postre en porciones individuales usando moldes pequeños o copas.
- Variación sin lácteos: Reemplazá la leche por leche de almendras o de coco para una versión más liviana.
Conclusión
Este postre de banana y naranja sin horno es una opción liviana, dulce y refrescante, ideal para cualquier momento del año. Su combinación de texturas y sabores lo convierten en un postre irresistible y fácil de hacer. Animate a probarlo y adaptarlo a tu gusto para convertirlo en un clásico de tu cocina.