El pan de carne es un plato muy versátil que suele estar presente en las mesas familiares. Esta versión incorpora mortadela, nueces y queso derretido, logrando una combinación deliciosa y fácil de preparar con ingredientes accesibles en cualquier almacén o supermercado argentino.
Ingredientes
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450 g de carne picada común (puede ser mezcla de vaca y cerdo)
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1 cebolla mediana
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1 huevo
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6 rebanadas de pan lactal o pan del día anterior
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Leche (cantidad necesaria para remojar el pan)
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50 g de queso rallado (puede ser reggianito o sardo)
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150 g de queso tybo, barra o muzzarella en cubos
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150 g de mortadela en láminas
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100 g de nueces picadas groseramente
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Pan rallado al gusto (opcional, según la consistencia)
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Sal y pimienta a gusto
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Un poco de aceite para engrasar la fuente
Preparación paso a paso
1. Preparar la base de carne
En un bol grande, colocar la carne picada, la cebolla bien picada, el huevo, el queso rallado, sal y pimienta. Agregar el pan previamente remojado en leche y escurrido. Mezclar con las manos hasta lograr una preparación uniforme.
2. Incorporar las nueces
Sumar las nueces picadas groseramente para dar textura y sabor. Si la mezcla queda muy húmeda, añadir un poco de pan rallado.
3. Armar el pan de carne
Sobre una hoja de papel manteca o aluminio, extender la mezcla en forma de rectángulo. Colocar encima las fetas de mortadela y los cubos de queso. Enrollar con cuidado hasta formar un cilindro compacto.
4. Horneado
Engrasar una fuente y colocar el pan de carne. Cocinar en horno precalentado a 180 °C durante unos 45 minutos, hasta que esté dorado por fuera y bien cocido en su interior.
Consejos y recomendaciones
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Para un sabor más intenso, podés sumar un toque de perejil fresco o provenzal a la mezcla.
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Dejar reposar unos 10 minutos antes de cortarlo ayuda a que mantenga la forma.
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Se puede acompañar con un puré de papas bien cremoso o con una ensalada fresca de hojas verdes.
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Si querés hacerlo más liviano, reemplazá parte de la carne por pollo picado.
Este pan de carne con mortadela y nueces es una receta rendidora, con un toque diferente y bien adaptada a la mesa argentina. Una opción ideal para compartir en familia sin complicaciones.