El pastel de limón con la técnica de “7 cucharadas” es una de esas recetas que sorprenden por su sencillez y resultado impecable. No necesitás balanza ni instrumentos complicados: con una simple cuchara medidora podés obtener un postre casero esponjoso, fragante y perfecto para acompañar la merienda o el desayuno.
Ingredientes
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3 huevos
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7 cucharadas de azúcar
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1 pizca de sal
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7 cucharadas de agua
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7 cucharadas de aceite neutro
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Ralladura de 1 limón
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Jugo de 1 limón
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7 cucharadas de harina común (0000)
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1 cucharada de polvo de hornear
Preparación paso a paso
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Preparar el horno y el molde: precalentá el horno a 170–175 °C. Enmantecá y enhariná un molde de 22–24 cm o una budinera. Si tenés, usá papel manteca en la base.
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Mezclar secos: tamizá la harina con el polvo de hornear y la pizca de sal. Reservá.
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Batir los huevos con azúcar: en un bol grande, batí los huevos con el azúcar durante 3–4 minutos hasta obtener una mezcla clara, espesa y aireada.
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Incorporar líquidos: añadí el aceite en forma de hilo sin dejar de batir, luego agregá el agua, la ralladura y el jugo de limón. Mezclá suavemente.
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Integrar secos: sumá la mitad de los ingredientes secos y mezclá con espátula en movimientos envolventes. Agregá el resto y repetí hasta lograr una mezcla lisa.
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Hornear: volcá la preparación en el molde, alisá la superficie y horneá de 30 a 38 minutos. Comprobá con un palillo: debe salir limpio o con migas húmedas.
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Reposar y desmoldar: dejá enfriar 10 minutos dentro del molde, pasá un cuchillo por los bordes y desmoldá sobre rejilla hasta enfriar por completo.
Consejos y recomendaciones
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Ralladura perfecta: utilizá solo la parte amarilla del limón, ya que la parte blanca aporta amargor.
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Huevos a temperatura ambiente: ayudan a lograr mayor volumen en la mezcla.
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Ajustar la acidez: si tu limón es grande, incorporá primero parte del jugo y ajustá según el gusto.
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Miga más tierna: reemplazá dos cucharadas de agua por leche o yogur natural.
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Molde alternativo: en budinera alta puede tardar unos minutos más, controlá con palillo.
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Glaseado opcional: azúcar impalpable con jugo de limón, aplicado sobre el pastel frío.
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Conservación: se mantiene fresco 2–3 días en recipiente hermético o podés congelarlo en porciones.
Este pastel de limón con la técnica de “7 cucharadas” es la prueba de que lo simple puede ser delicioso. Una receta práctica, económica y con un sabor casero que siempre conquista.