Hay postres que se vuelven tradición porque evocan recuerdos y emociones. El flan de Maizena es uno de esos clásicos que nunca pasan de moda. Su aroma dulce, el caramelo dorado y la textura suave hacen que cada bocado sea un regreso a los momentos familiares alrededor de la mesa.
Si buscas un postre sencillo, económico y que siempre quede perfecto, esta receta es para ti. No necesitas técnicas de repostería complicadas ni equipos especiales: con pocos ingredientes tendrás un flan cremoso y delicioso.
Ingredientes
Para 6 a 8 porciones:
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500 ml de leche entera (puede ser semidescremada o vegetal).
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1 taza de azúcar (para la mezcla).
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2 huevos grandes.
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1 cucharadita de esencia de vainilla.
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2 cucharadas de Maizena (fécula de maíz).
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Caramelo casero hecho con azúcar.
Notas útiles:
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Si no tienes Maizena, puedes usar otra fécula de maíz.
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Para una versión más ligera, utiliza leche descremada o bebidas vegetales como almendra o avena.
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El azúcar puede reemplazarse con panela o endulzantes aptos para hornear.
Preparación paso a paso
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Prepara el caramelo.
Derrite una taza de azúcar en una sartén a fuego medio hasta que tome color dorado. Evita mover con cuchara para que no se cristalice. -
Cubre el molde.
Vierte el caramelo en el molde para flan, distribuyéndolo en la base y los bordes. -
Calienta la leche.
Calienta la leche en una cacerola hasta que esté tibia, sin hervir. -
Bate los huevos.
En un tazón, mezcla los huevos con el azúcar hasta que se integren bien. -
Disuelve la Maizena.
En un poco de leche fría, disuelve la Maizena para evitar grumos. -
Integra todo.
Añade la mezcla de Maizena a la leche caliente, removiendo constantemente, y luego incorpora los huevos batidos con azúcar. -
Espesa la mezcla.
Cocina a fuego bajo, removiendo hasta que tome consistencia cremosa. -
Agrega la vainilla.
Incorpora la esencia de vainilla y mezcla bien. -
Vierte en el molde.
Coloca la mezcla en el molde acaramelado. -
Hornea al baño maría.
Hornea a 180 °C durante 45 minutos aproximadamente, hasta que al insertar un cuchillo salga limpio. -
Enfría y refrigera.
Deja reposar a temperatura ambiente y luego refrigera al menos 4 horas. -
Desmolda con cuidado.
Pasa un cuchillo por los bordes y desmolda sobre un plato grande.
Consejos para servir y conservar
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Presentación: acompaña con frutas frescas, nata montada o un toque de canela en polvo.
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Decoración: unas hojas de menta realzan el aspecto final.
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Conservación: guarda en la nevera cubierto con film. Dura entre 3 y 4 días.
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No congelar: pierde su textura al hacerlo.
Variaciones del flan de Maizena
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Sin horno: deja enfriar en la nevera directamente, obtendrás una textura más parecida a natilla.
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Vegano: sustituye la leche por bebida vegetal y los huevos por más fécula de maíz disuelta en agua.
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Sabor extra: agrega ralladura de limón o naranja para un toque cítrico.
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Más ligero: reduce el azúcar y utiliza leche descremada.
Consejos y recomendaciones
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Usa moldes individuales para una presentación más elegante.
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Si quieres una textura más suave, cuela la mezcla antes de verterla en el molde.
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Para evitar grietas, no sobrehornees el flan.
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Si lo preparas un día antes, los sabores se intensifican y la textura mejora.
El flan de Maizena es un postre tradicional que combina simplicidad y sabor. Prepararlo en casa es crear un momento especial que se comparte y se disfruta. Una receta fácil, económica y versátil que siempre te hará quedar bien.