La carne curada casera es una excelente alternativa a los embutidos comprados, con un sabor intenso y natural.
Con pocos ingredientes y algo de paciencia, podés preparar una opción deliciosa para picadas o sándwiches.

Te recomendamos: Este es el secreto para hacer una carne tierna y jugosa
Este método de curado realza los sabores y permite conservar la carne por más tiempo sin necesidad de aditivos.
Además, es una receta sencilla que solo requiere tiempo de espera y un buen manejo de la humedad y la temperatura.
Si querés sorprender con un fiambre casero, seguí estos pasos para hacer tu propia carne curada con ajo.
Ingredientes
- 1 kg de carne (preferentemente magra y de buena calidad)
- 5 dientes de ajo picados
- 500 g de sal gruesa
- 1 cucharada de pimienta negra molida
- 1 cucharadita de comino (opcional)
- 1 cucharadita de hierbas secas (orégano, tomillo, laurel)
- 3 litros de agua
Preparación
- En una olla, mezclar los 3 litros de agua con la sal gruesa y llevar a hervor. Una vez que rompa el hervor, apagar el fuego y dejar enfriar a temperatura ambiente.
- Lavar bien la carne y retirar cualquier exceso de grasa.
- Sumergir la carne en la salmuera ya fría y dejar reposar durante 24 horas a temperatura ambiente.
- Retirar la carne de la salmuera y secarla bien con papel absorbente.
- Frotar la carne con el ajo picado, la pimienta y las especias elegidas, asegurándose de que quede bien impregnada.
- Golpear la carne suavemente con un palo de amasar para que absorba mejor los sabores.
- Colocar la carne en un recipiente cubierto con papel absorbente y llevar a la heladera por 24 horas más.
- Envolver la carne en una gasa o tela fina y atarla con hilo de cocina.
- Colgarla en un lugar cálido y ventilado, como cerca de un radiador o en un balcón si el clima es seco.
- Dejar secar entre 3 y 4 días, revisando cada tanto para asegurarse de que el proceso avanza correctamente.
- Llevar la carne a la heladera durante una noche antes de consumirla.
La carne curada se puede conservar en la heladera por varias semanas y es ideal para servir en picadas, acompañada de pan y queso.