La elaboración de ñoquis caseros es una de esas tradiciones culinarias que conjuga sencillez y maestría. Su origen, asociado a la cocina italiana, ha trascendido fronteras para convertirse en un plato reconfortante en numerosos hogares del mundo.
A pesar de su apariencia modesta, los ñoquis requieren precisión y paciencia: el equilibrio entre los ingredientes, la textura de la masa y el punto exacto de cocción son determinantes para alcanzar un resultado esponjoso y sabroso.
La receta que se presenta a continuación está pensada para conservar la esencia tradicional de los ñoquis de patata, incorporando un toque profesional a través del uso controlado de harina, la incorporación de yemas para enriquecer la masa y una sutil dosis de nuez moscada que realza su sabor sin opacar el gusto natural de la patata.
Esta preparación es ideal tanto para quienes desean iniciarse en el arte de los ñoquis como para los cocineros más experimentados que buscan una base sólida y versátil para múltiples variantes.
Ingredientes
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1 kilo de patatas harinosas (como Monalisa o Kennebec)
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2 yemas de huevo
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200 gramos de harina de trigo
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Sal al gusto
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Una pizca de nuez moscada en polvo
Preparación Paso a Paso
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Cocer las patatas:
Lavar bien las patatas y cocerlas enteras, con piel, en abundante agua con sal durante unos 25 a 30 minutos o hasta que estén tiernas al pincharlas. Cocinarlas con la piel ayuda a evitar que absorban demasiada agua. -
Preparar el puré:
Escurrir las patatas y pelarlas en caliente, manipulándolas con cuidado para no quemarse. Pasarlas por un pasapurés o machacarlas con un tenedor hasta obtener una textura fina, sin grumos. Dejar entibiar antes de continuar, permitiendo que parte de la humedad se evapore. -
Formar la masa:
Sobre una superficie limpia, formar un volcán con el puré tibio. Incorporar las yemas en el centro, añadir la sal y la nuez moscada, y comenzar a mezclar. Añadir gradualmente la harina mientras se integra la mezcla, trabajando la masa con las manos hasta que se vuelva suave y apenas pegajosa. Es importante no amasar demasiado para que los ñoquis no se endurezcan. -
Formar los ñoquis:
Dividir la masa en porciones, formar cilindros finos de aproximadamente 1,5 cm de grosor y cortar en trozos de unos 2 cm. Si se desea, marcar cada trozo con un tenedor o una tabla especial para ñoquis para crear surcos que ayudan a retener mejor la salsa. -
Cocinar los ñoquis:
Hervir abundante agua con sal. Cocinar los ñoquis en tandas; estarán listos cuando suban a la superficie, lo que suele ocurrir en 2 o 3 minutos. Retirarlos con una espumadera y servir de inmediato con la salsa elegida.
Consejos Finales:
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Elegir patatas harinosas garantizará una textura más ligera y menos húmeda, lo que permite utilizar menos harina.
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Las yemas aportan riqueza y ayudan a unir la masa sin que resulte demasiado densa.
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Es preferible preparar la masa justo antes de cocerla, ya que si se deja reposar demasiado puede volverse pegajosa.
¡Esta receta, sencilla y efectiva, es una base perfecta para disfrutar de la cocina casera en su forma más auténtica!